Sábado 22 de marzo de 2008.
La mañana comenzó cuando me tuve que levantar al baño, y me topé a mi hermana y cuñado recién llegados preguntando quién dormía en el sillón. Minutos más tarde, Elohym se despertaría y empezaríamos a platicar. Preguntó qué camión lo sacaba al centro, y le dije que se esperara un rato para irnos al cultural en bola; Pako despertó después de un rato y le pregunté si se iba a ir por su cuenta o nos iba a esperar a nosotras, ya que sus compas del trabajo se iban a reunir para putear emos xD tal y cómo se haría en los días siguientes en México y Monterrey, después del sonado caso de Querétaro... y me dijo que se iba a ir por su cuenta y que le hablara para juntarnos allá.
Entre la plática con mi hermana y cuñado, Lluvia y Yareni despertaron, tomaron un baño, desayunamos todos, y Lluvia quiso ver a Nino por última vez antes de decir: ya me harté de Amelie!!!! de aquí a que yo terminé de echarme el chal y esperar mi turno en el baño, nos dieron las horas, y nuestro invitado dejó de mostrar su lado paciente y casi salta por la ventana, así que lo mandé al cultural con Pako para que mínimo saliera a la civilización de nuestro paisaje desconocido. Nuevamente, mi hermana y cuñado se dedicaron a ir al cultural a dar una vuela y tratar, por tercera vez consecutiva de cazar esa especie extraña que no se dejaba ver...
Nosotras todavía nos tardamos la horas arreglándonos, cotorreando, jijiji, jajaja, viendo la película (bueno, pedazos) del Aro 2, que con mis comentarios y nuestaras opiniones sinceras sobre las posibles acciones que pudieron haber tomado los personajes, fue demasiado divertida (MANITA DE PUERCO!! xD!!). Salimos de la casa con rumbo a Plaza Independencia para que Lluvia buscara un cajero de Santander y revisáramos los boletos de regreso para Torreón ahí mismo, en el módulo de estrella blanca. Después de un buen rato en la agencia, la tipa todavía escribió mal el nombre de Yareni (ni porque le prestó la credencial y lo copió eh) y pasamos rápidamente a la farmacia Guadalajara entre Soriana y la plaza por un gatorade; regresamos a la calzada a esperar el 62 D que nos aventaría en el tianguis cultural (frente al parque Agua Azul).
Una vez que llegamos nos reunimos con Pako, y empezamos el recorrido por el perímetro de la plaza, avanzando sólo dos locales antes de que Yareni se estacionara a preguntar el precio de una película que yo no conozco (y se me olvidó el nombre para la fecha en que redacto esta historia xD) y le dijeron "3x$50", como Pako y Lluvia no me pelaron cuando dije: momento!! ps ahí me quedé yo viendo películas extrañas como las que suelen llamar mi atención, y Yareni fascinada viendo "Dolls güey!! está bien chida!! la quiero"... y otras tantas, pero tuvo que decidirse solo por 3 y ya cuando íbamos de salida, que ya nos ven los otros dos y se ponen medio a ver el lugarcillo, Pako terminó comprándose un disco ante la demora del tipo por ponerle una cajita y etiqueta a la película huérfana, y continuamos en nuestro recorrido.
Pasamos entre los anticuarios, los freakies, la música pirata, la ropa maquilada, los artesanos, los vegetarianos con sus puestos de comida, los hippiosos tocando sus djembés, la gente que parecía brotar del suelo (como ¡¡margaritas!!), los emos invdiendo el lugar... fue gracioso porque nos empezó a contar Pako que antes de llegar, estaban unos emos en la explanada al final del tianguis, con micrófono en mano, diciendo que no querían que los putearan, que si todos éramos iguales, por qué los trataban diferente (o sea, que no se supone que eso quieren, ¿quién los entiende? -->cierto, NADIE los entiende según ellos, whatever...).
Nos hartamos de dar vueltas y vueltas y vueltas por donde mismo, tratando de buscarle un regalo a Abril, Andrea y Enver, quien para este momento de la vida ya debe tener en sus manos la diadema azul que Yareni le llevó (yo sigo sin ver el video el anticristo emo, pero prometo hacerlo pronto xD). Después del rotundo aburrimiento de dar vueltas en círculos y tratar de regatear por mercancía, salimos de ahí con dirección hacia el mercado Libertad (alias, San Johnny, para comprar la bota de tequila para Esteban.
Según Pako, eran "como 5 cuadras" así que nos fuimos a pie... nunca dijo de qué tamaño eran las famosas cuadras ¬¬ pero ciertamente, a mi siempre se me ha hecho más largo caminar ese tramo del lado de la calzada que por el centro (tal vez porque hay más cosas que ver de aquel lado, o simple costumbre). Llegamos muriendo de sed, quemados, hartos y queriendo comer; la búsqueda comenzó en el primer piso, de orilla a orilla, subimos, bajamos, volvimos a dar vuelta, y de puesto en puesto, nos mandaban hacia donde ya habíamos ido a preguntar. En ese "ping-pon" estuvimos fácil unos 15 minutos, hasta que por fin, dimos con un local que atendía una amable señora que nos mostró las "botas"; no convencida del todo de la que le mostraron, Yareni pidió que le llevaran la de 2 litros, y en la espera, la desesperación, la weba acumulada y el hecho de tener que volver a casa a comer, empacar y salir a la central, ya se estaba autoconvenciendo de que era un buen tamaño 1 litro, hasta que apareció el fulanito encargado de ir a la bodega, y siempre si la compró de 2 litros xD.
De regreso ya íbamos todos en automático, después de haber atravesado medio mercado (de nuevo) pero por el lado de las fonditas y restaurantes, sin éxito alguno para conseguir tortas ahogadas por ser viernes santo (si, la gente religiosa domina las costumbres para poder comer carne los viernes, ideas después de todo....), no recuerdo si Lluvia fue al que se quedó bien dormida en el camión, pero pues, ahí andabamos los 4 para el mismo rumbo xD.
Llegamos, comimos, alcanzamos a hacernos patos un rato, llegaron de la calle mi cuñado y hermana y faltando como una hora antes de irnos para la central, llega mi mamá con mi primo favorito y mi tía Mariana... preguntaron que cómo estábamos, nosotras por cortesía preguntamos por mi abuela (porque de ganas, ni preguntábamos la verdad...), mi mamá comenzó a darnos santo y seña de la vida de un montón de gente de allá de Torreón, más amigas y conocidas suyas que mías, y se quedó con cara de mmm cuando vio al pato y preguntó: ¿y eso? mi primo y su madre, por el contrario, se vieron fascinados con el pato que se asustó cuando trataron de acariciarlo y tiró su comida y agua (para variar).
Después de esa escaza charla, comprobé que definitivamente yo no tengo tópico de conversación con mi madre (si antes no lo tenía cuando vivía en su casa, ahora que estoy lejos, menos, trsite pero cierto, y a mi no me quita el sueño); se nos fue el tiempo entre preguntar por X y Z, y de modo muy amable yo em levanté del suelo y les dije: nosotros ya nos vamos a dejar a las muchachas a la central, pero quédense, Patty y Juan no van a ir, a lo que mi mamá dijo: no ya nos vamos nosotros tambipen porque salimos mañana temprano, y hasta le dijo a mi primo Saúl que se fuera unos dos días para allá, y convencido de los tianguis por mi causa, el chiquillo aceptó.
Adiós, se cuidan, etcétera terminaron con esa breve visita de parte de mi madre a la casa, y yo sólo fui por mi bolsa, y de nuevo: a la calle!!! En la hora de camino a la central íbamos echando plática Lluvia y yo (ya no recuerdo de qué, eso fue hace un mes!!! maldición!! debi terminar esto antes ¬¬), Yareni como que quería dormirse pero al final no pudo, y Pako iba perdido en su planeta oyendo música del celular.
Nos bajamos del camión, caminamos al módulo 7 y dejamos a nuestras viajeras sanas y salvas, con suficiente tiempo para preguntar por el número de su autobús de salida, y nos despedimos casi en chinga porque luego se nos iba el último camión de regreso para la casa, así que entre las gracias, lo abrazos, el me "dio mucho gusto verte güey", nos despedimos y salimos de la central sin olvidar recordarle que siempre la "manita de puerco" estaría presente...
FIN xD
nota de la editora: debido a múltiples cuestiones de trabajo y red, no había podido terminar de escribir esta crónica, ya pasó un mes de esta visita, y yo me sigo atacando de la risa al menos, de lo gracioso que le pareció el comentario de la "manita de puerco# a Lluvia, pero esa es otra historia; al mismo tiempo, llevo como 2 semanas sin escribirle un mail a Daian que ya se olvidó de mi también, y Patito ya está mudando su plumaje a un tono azulverdoso como el fondo del mar... la parte interesante de esta crónica la escribo después, que fue como terminó mi glorioso fin de semana santa en marzo...
No comments:
Post a Comment