Recuerdo haberme topado por casualidad con esta ventana por alguna calle del centro, cerca del parque rojo cuando recién cambié de residencia y caminaba por todos lados con mi cámara en mano... han pasado ya casi once años.
Me he acordado de unas tantas cosas en el transcurso de estos tres últimos días, algunas en parte removidas por el hecho de la reciente partida de Shinji, cosas que retraté en imágenes y que en su momento me parecieron geniales, profundas, inspiradoras, ridículas, asombrosas.
Encontré algunas canciones que escuchaba entonces almacenadas en mi gmail, y en este instante, la nota se redacta al compás de "el desayuno", del EP de Abeja (me gustaba mucho escuchar ese disco recién que pude bajarlo de MUSITEKA y traerlo en el que fue entonces mi regalo, un reproductor de mp3 compacto).
Me esforzaba bastante en hacer una sola toma de lo que veía, y ahora que vuelvo a ver esas fotografías digitales, veo grandes lecciones.
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